Casco Vello, y la verdad es que casi todo eran caras conocidas, estaba medio ejército mercenario allí. Podéis ver algunas fotos en el álbum web.La caracterización no era obligatoria, tan sólo se pedía no llevar vaqueros o algo que desentonase, aunque hubo uno que parece que le resultó imposible encontrar algo apropiado, y lo único negro que tenía era una camiseta de Whitesnake… 😉 La partida podéis encontrarla en internet, pues ya ha sido jugada en otras ocasiones a lo largo y ancho de España. Buscad fotos de las partidas, es muy curioso ver cómo se ha caracterizado la gente por ahí. Cada uno hace lo que puede, lo que importa es pasarlo bien. La verdad es que hay muchos personajes y todos tienen tramas interesantes, no por ser la criada vas a divertirte menos que el que hace de Emperador (quizá todo lo contrario), y aunque había jugadores con poca (o ninguna) experiencia, en general todo el mundo se metió bastante en el papel y la partida resultó de lo más entretenida. Había tramas políticas, románticas, intereses bélicos y artísticos, pero gracias a la interpretación de los jugadores hubo aún más «chicha»: traiciones e incluso asesinatos. La que hacía de anfitriona de la fiesta incluso se arrancó a tocarnos un par de piezas de violín, y luego tuvimos la oportunidad de lucirnos bailando vals. A pesar del vino y la cerveza, no hubo que lamentar daños personales. Una noche estupenda, en definitiva. Alternativa, entretenida, original y hasta didáctica, porque muchos de los personajes fueron personas reales de la nobleza austro-húngara, que intervinieron directamente en hechos que desencadenaron la Primera Guerra Mundial. ]]>
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